Este mediodía ha tenido lugar junto al Ayuntamiento de Coslada una concentración silenciosa en repulsa por los últimos asesinatos machistas ocurridos esta semana. A la misma han asistido miembros del equipo de Gobierno y de la Corporación municipal, con el alcalde, Ángel Viveros, a la cabeza.
Han sido cuatro las mujeres asesinadas víctimas de la violencia machista en los últimos días. Se trata de Vanesa, de 36 años, apuñalada en Móstoles; de otra mujer de 35 años, cuya identidad no ha trascendido, asesinada en L´Hospitalet.
El sábado por la tarde fue encontrada muerta en Burgos una mujer de 20 años que previamente se había puesto en contacto con el teléfono de emergencias 112, refiriendo una agresión. Esa misma jornada, en Pamplona, un hombre de 51 años mató a su pareja de 47. También se han producido agresiones machistas con resultado de lesiones, en algunos casos graves, contra mujeres en Cáceres, Málaga y Valencia.
En lo que va de año son 26 las mujeres víctimas mortales por violencia de género en España y 25 el número de menores que se han quedado sin sus madres. Desde 2003 se elevan a 1.210 los feminicidios en el ámbito de la pareja y la expareja. El número de niños y niñas que se han quedado sin sus madres como consecuencia de la violencia machista asciende a 402 desde 2013.
El alcalde de Coslada, Ángel Viveros, ha hecho un llamamiento para «que haya una respuesta firme de todas las administraciones, que debemos trabajar para que no se reproduzcan estos hechos. Están asesinando a mujeres por el hecho de serlo y eso es violencia de género. Todos los demócratas tenemos que luchar para erradicar esta lacra sin dar un paso atrás».
Por su parte, la concejala de Igualdad y Diversidad, Paz Garrretas, ha apuntado que «hasta el 30 de junio llevábamos 24 mujeres asesinadas por violencia machista o de género, que no intrafamiliar. Es muy importante que reivindiquemos que no debe haber ni una víctima más. Es un hecho que existe la violencia de género y está matando mujeres».
Manifiesto
El Consejo de la Mujer de Coslada elaboró a principios de este año un manifiesto en el que consideraba imprescindible la renovación de los acuerdos políticos del Pacto de Estado contra la violencia de género.
En el mismo se afirmaba que «la colaboración entre los poderes públicos y la sociedad civil es imprescindible para el objetivo de fortalecer una relación entre la parte social, judicial y policial, que proteja mejor a las víctimas».
Asimismo, se abogaba por «reforzar los mecanismos que la legislación vigente tiene previstos en nuestro país y evaluar su aplicación». En concreto, creemos imprescindibles el análisis y la aplicación de las siguientes medidas:
- Cumplimiento estricto de las medidas de vigilancia y control incluyendo la evaluación continua del Sistema de Seguimiento Integral en los Casos de Violencia de Género (VioGén).
- Reformar la coordinación judicial y policial y de adoptar medidas especializadas para las víctimas con especial vulnerabilidad.
- Apertura en todas las comunidades autónomas y con la dotación suficiente de medios de las Unidades de Valoración Forense Integral previstas en la Ley Orgánica de medidas de protección integral contra la violencia de género.
- Refuerzo, y constitución, en su caso, del sistema de acompañamiento y de ayuda a la toma de decisiones que permita a las mujeres dar con suficiente seguridad el paso de la ruptura de la relación violenta, evitando situaciones de desprotección, con especial atención a colectivos especialmente vulnerables a sufrir violencia de género, como mujeres adolescentes y jóvenes, mujeres mayores de 65 años, mujeres con cargas familiares no compartidas, mujeres migrantes, mujeres rurales, o mujeres con discapacidad, entre otras.
- Más y mejor formación con perspectiva de género de todos los operadores (policiales, jurídicos, sanitarios, etcétera) que se ocupan de la atención y la valoración del peligro que corren las víctimas.
- Intervención urgente a favor de la prevención de la violencia contra las mujeres en cualquiera de sus formas y de incidir en la sensibilización social, en toda la población, pero en especial entre la población más joven, incluyendo campañas centradas en combatir la minimización del riesgo utilizando nuevos canales de difusión.
- Incorporar mejoras en la recogida de datos y elaboración de estudios, incluyendo la publicación actualizada de los informes del Observatorio estatal contra la violencia de género.
El manifiesto terminaba con la exigencia al «Estado y a la Comunidad Autónoma de Madrid, de la activación y refuerzo de todos los mecanismos, incluyendo la dotación de fondos públicos, para seguir trabajando en la erradicación de la violencia de género».