Comisiones Obreras (CCOO) ha denunciado que «el Gobierno de la Comunidad de Madrid está dejando sin médicos radiólogos a los hospitales públicos de la red del SERMAS que construyó el Gobierno de Esperanza Aguirre y cuyos servicios están semiprivatizados, como es el caso del Hospital del Henares».
Además, insisten en que en otros, como en el hospital Infanta Cristina de Parla, el hospital Infanta Sofía de San Sebastián de los Reyes, o el hospital Infanta Leonor de Vallecas, también faltan técnicos de rayos y hay arcos de quirófanos o TC que no tienen personal y no se utilizan. El Hospital del Sureste en Arganda no tiene técnicos ni médicos radiólogos de urgencias. En el Hospital del Tajo se instaló una máquina nueva de rayos convencional y está parada porque tampoco hay técnicos.
«Ante esta situación, los médicos de urgencias advierten del riesgo que esto supone para los pacientes. Se podrían demorar diagnósticos vitales y tratamientos que son tiempo-dependientes, ordenando traslados a otros hospitales para hacer pruebas de radiodiagnóstico imprescindible y que no es posible realizar en el centro», denuncian.
En ocasiones, aseguran que «se está radiando innecesariamente a los y las pacientes porque no hay un facultativo especialista en Radiología presente para hacer una ecografía, siendo en muchos casos la alternativa más rápida hacer un TC con la carga radiológica que esto conlleva».
«En el Hospital del Henares la situación es irreversible»
En el caso del Hospital del Henares, alertan de que «la situación ya es irreversible». E informan de que la Consejería de Sanidad ha comunicado por escrito que ya no van a disponer de radiólogos presenciales en el Servicio de Urgencias, al menos la mitad del mes, y ha remitido un protocolo de actuación para el manejo de los pacientes cuando se necesiten pruebas radiológicas urgentes “evitando” la presencia de un radiólogo.
«En los casos en los que se necesite TC para hacer un diagnóstico, el protocolo recoge que se radie solo con un técnico de rayos y si hay alguna incidencia durante la realización de la prueba, que se pida el respaldo del médico de urgencias que está para atender las urgencias y no para desplazarse a otra ubicación para supervisar los posibles efectos adversos de la administración de un contraste», señalan.
Y añaden: «Una radiografía con contraste con reacción adversa podría poner en peligro al paciente y en muchos casos la responsabilidad de inyectar del contraste (en estos hospitales) la tiene que asumir el técnico de rayos al que no le corresponde, indican los profesionales».
Radiaciones innecesarias
Si hay que hacer ecografía, el documento también plantea que se practique sin radiólogo y en casos en los que pueda demorarse que se cite por vía ordinaria. Si la patología no es demorable, la Consejería ordena que se traslade al paciente al Hospital de La Princesa para adultos o al Hospital Niño Jesús para Pediatría. Esto conlleva un traslado en ambulancia al centro de referencia (con el tiempo de espera de las ambulancias) y regreso al Hospital del Henares para concluir el diagnóstico.
«Los urgenciólogos insisten en que se está poniendo en riesgo a los pacientes, que la falta de personal tiene graves consecuencias para la población de referencia de estos hospitales y que es un agravio comparativo con otros ciudadanos/as que tienen hospitales equipados con personal suficiente», agregan.
Y explican que disponer únicamente de la posibilidad de realizar TC para que sea informado de forma telemática puede inducir a una petición excesiva de dicha prueba en sustitución del estudio ecográfico, con las consecuencias en carga radiológica para el paciente que ello conlleva, y teniendo además el TC una resolución diagnóstica inferior a la ecografía en determinados supuestos (trombosis venosa profunda, colecistitis, escroto agudo…). Por todo ello, reclaman que se informe a la ciudadanía a través de las autoridades municipales correspondientes de la situación a la que se enfrentan.
CCOO califica la situación de “insostenible”, cree que es una vuelta de tuerca más del deterioro de los servicios públicos y reclama la contratación urgente de radiólogos/as y técnicos de rayos en la Unidad Central de Radiodiagnóstico (UCR), que es la empresa pública a la que pertenecen los profesionales de Radiología y Radiodiagnóstico que dan servicio a los seis hospitales semiprivatizados del Servicio Madrileño de Salud (SERMAS), que dan servicio sanitario público a 1.250.000 personas.