Sin duda alguna ha dejado de ser una iniciativa únicamente local para atraer público desde otras zonas de la Comunidad y de Madrid capital. Es la evolución que ha experimentado el Cambalache de Coslada, actividad puesta en marcha en 2012 que, con el paso del tiempo, ha ido adquiriendo mayor relevancia gracias la asistencia masiva de personas.
Ayer, como cada primer domingo de mes, de nuevo la zona de Ciudad 70 en la que se desarrolla ha sido un hervidero de gente dispuesta a intercambiar, comprar y vender objetos de segunda mano, algunos de lo más curioso y valioso.
El alcalde de Coslada, Ángel Viveros, reconoció este domingo durante su visita al Cambalache que “no puedo venir siempre, pero sí suelo hacerlo habitualmente y lo hago, no tanto como alcalde, sino como vecino, porque alguna vez he encontrado algún libro o utensilio más que interesante”.
El regidor recordó que esta iniciativa “ya durante la pasada legislatura adquirió unas dimensiones en cuanto a importancia que superaron las expectativas y creemos que es una interesante herramienta de dinamización de este importante barrio y de la ciudad por los visitantes de otras localidades que atrae”.
Asimismo, se mostró convencido de que “la rehabilitación que estamos llevando a cabo en la arteria principal de este barrio, en la avenida de Berlín y sus calles adyacentes, permitirá dar un impulso más tanto a la zona como a este mercado de segunda mano e intercambio”.
El Cambalache de Coslada se puso en marcha hace más de una década y lo impulsa la Concejalía de Desarrollo Económico y Comercio del Ayuntamiento de Coslada. En él participan, habitualmente, alrededor de 200 puestos en los que se puede hallar material de lo más variopinto.
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