Agentes de la Policía Nacional han detenido a un varón por estafar a una persona de edad mediante el “timo del hijo en apuros”. Utilizó distintas aplicaciones de mensajería instantánea para ganarse la confianza de la víctima y hacerle creer que su familiar se encontraba en apuros económicos y tenía deudas que saldar de forma inmediata.
La investigación se inició a raíz de la denuncia del afectado en la comisaría local de Coslada, donde manifestó que había recibido varios mensajes en su móvil de una persona que se hacía pasar por su hijo.
En primer lugar, le hizo creer que su familiar no utilizaba su número de teléfono habitual debido a que se encontraba dañado. Posteriormente, y una vez ganada la confianza de la víctima, le solicitó sumas de dinero hasta en tres ocasiones diferentes, alegando la necesidad inmediata de saldar varias deudas urgentes, entregando más de 2.000 euros.
Tras numerosas tareas de investigación, los agentes lograron identificar al titular de la cuenta bancaria donde se habían recibido los ingresos, descubriendo que el mismo residía en la provincia de Zaragoza. Por todo ello, establecieron un dispositivo policial para su localización, logrando su arresto a finales del pasado mes de agosto y pasando a disposición de la autoridad judicial como presunto responsable de un delito de estafa.
¿En qué consiste la “estafa del hijo en apuros”?
Se trata de un tipo de timo en el que los estafadores contactan con sus víctimas a través de aplicaciones de mensajería instantánea, haciéndose pasar por su hijo o, en otras ocasiones, por otro familiar.
Posteriormente, justifican que utilizan otro número de teléfono diferente por tener su terminal habitual dañado.
Para terminar de captar su atención y lograr el engaño, emplean diferentes excusas simulando tener alguna necesidad urgente que justifique esa inmediatez de recibir el dinero. Finalmente, les facilitan su número de cuenta y la cantidad que necesitan para saldar dichas deudas.
La Policía Nacional aconseja que en caso de recibir un mensaje de este tipo, asegurarse que se trata de nuestro familiar tratando de contactar con él por otro medio antes de realizar cualquier movimiento bancario y así evitar ser víctima de este tipo de estafa. Una vez se confirme que se trata de un estafador, bloquear el contacto y ponerlo en conocimiento de la Policía Nacional.